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Argumento:
Una mujer vengativa, Carrigan Crittenden (Cathy Moriarty), se pone molesta por la lectura del testamento de su difunto padre, ya que sólo le otorgaron la horripilante Mansión Whipstaff, en Amistad, Maine, en lugar de su fortuna, sin embargo, cambiará de parecer cuando se entera de que en ella hay un tesoro escondido. Ella y su asistente Dibs (Eric Idle) van a la casa tratando de investigar, descubriendo que está embrujada por un fantasma amistoso llamado Casper (Malachi Pearson) y sus desagradables y bromistas tíos, el trío fantasmal (Gordi, Látigo y Tufo) (Brad Garrett, Joe Nipote y Joe Alaskey) , quienes intentan sacarlos de la propiedad. Carrigan usa varios métodos para librar a la casa de los fantasmas, fallando una y otra vez. Mientras tanto, Casper ve un informe de un terapeuta paranormal, James Harvey (Bill Pullman), y se enamora de inmediato de su hija adolescente Kat (Christina Ricci). Con el fin de conocer a Kat, Casper convence a Carrigan de llamar a James Harvey para que investigue el inquietante misterio.
La relación de James y de Kat es tensa, tras la muerte de su madre y su esposa Amelia (Amy Brenneman), éste dedica todo su tiempo a buscarla, creyendo que ella tiene asuntos pendientes y no ha pasado a la otra vida. Como resultado, Kat no cuenta con amigos, ya que están en constante movimiento por todo el país. Al llegar en Maine, el plan de Casper de hacerse amigo de Kat y su padre resulta contraproducente cuando sus tíos caóticos llegan a casa y tratan de obligarlos a irse. James está resuelto y se las arregla para moverse con éxito. Kat intenta encajar en la escuela, y, sin querer, gana popularidad por su estancia en la famosa mansión Whipstaff; su compañeros sugieren que se realice la fiesta de Halloween allí en vez de la casa del árbol de la popular Amber (Jessica Wesson).
Mientras tanto, el trío intenta hacer las paces con James e incluso dicen que encontrarán a Amelia para él, a su vez Kat y Casper se convierten en amigos. Kat descubre que Casper no recuerda los detalles de su vida, por lo que lo ayuda a recordar; esto los lleva a una sala de juguetes vieja y abandonada donde Casper comienza a recordar detalles de su vida, y cuando se encuentra con un trineo, recuerda que murió de una enfermedad (problamente neumonía), al quedarse hasta tarde en el frío; Casper decidió no seguir adelante con el fin de hacerse cargo de su solitario padre. También recuerda una máquina que su padre creó, llamada Lázaro, capaz de traer un fantasma de vuelta a la vida. Carrigan y Dibs escuchan esto y concluyen: uno de ellos debe morir y volver como un fantasma con el fin de entrar en la bóveda que, supuestamente, contenía el tesoro que buscaban. Carrigan intenta matar Dibs, pero cae accidentalmente de un precipicio, matándose a sí misma.
James y el trío van a varios bares, mientras James se vuelve cada vez más ebrío, el trío decide que siempre podían divertirse si ellos hacen a su trío un "cuarteto" matando a James. Sin embargo, James les agrada mucho por lo que deciden no matarlo. En cambio, James cae a su muerte en una alcantarilla abierta. De vuelta en la casa, Carrigan, como un fantasma, detiene la máquina Lázaro antes de que pueda resucitar a Casper (quien era consciente de que sólo había una dosis de la poción para traerlo a la vida) y roba el tesoro. Casper y Kat la engañan al hacerle admitir que, con su tesoro y la poción para traerla de vuelta a la vida, no tiene asuntos pendientes, y ella es involuntariamente expulsada a la otra vida.
El tesoro, revelado por Casper, es una pelota de béisbol Brooklyn Dodgers firmada por su jugador favorito Duke Snider. James regresa a su casa, ahora como fantasma y no reconoce a Kat hasta que ella le muestra quién es. Casper entonces renuncia a su oportunidad de una nueva vida con el fin de que James viva. Cuando la fiesta empieza, Kat baja a saludar a los huéspedes, mientras que el trío ahuyenta a Amber y su novio Vic (Garette Ratliff Henson), que habían llegado para sabotear la fiesta. Amelia aparece y le agradece a Casper y por su sacrificio, ella le permite, hasta la campanada que da las 10, regresar a la vida. Casper se acerca Kat, quien no lo reconoce hasta que empiezan el baile, mientras que Amelia le dice a James que ella estaba tan bien cuidada durante la vida que no tenía "asuntos pendientes", y aboga a James a que no la busque más. En la campanada que daba las 10, cuando Casper y Kat se besan, se rompe el hechizo y se convierte de nuevo en un fantasma. Él dice "boo" a los invitados, quienes gritan de terror y huyen de la mansión. No queriendo dejar que una fiesta se desperdicie, James lidera al trío en comenzar una fiesta de Halloween que les es propia. Kat, James y Casper bailan mientras el trío fantasmal toca música para ellos.
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